El pan de barra, también conocido como pan desmayado, como jocosamente se le conoce en el argot cubano, es un pan especial para acompañar con pastas, o casi cualquier agrego, al ser muy fácil de tratar. Su miga, suave y esponjosa, invita a mojarlo en salsas y caldos. No hay celebración familiar, ni comida, ni cena, que se precie de serlo, que no cuente con la presencia estelar de una buena barra de pan. Ya sea tostado, untado con mantequilla, ajo, o simplemente solo, el pan de barra es un clásico que nunca falla en la mesa cubana. Y si sobra, ¡no te preocupes! Al día siguiente, tostado, se convierte en el acompañante perfecto para un buen café con leche, o en la base ideal para unas deliciosas torrijas. ¡Un verdadero todoterreno culinario!